Alquiler de coches en Roma

Si viajas a Italia, no puedes perderte su capital. Roma es conocida como la "ciudad eterna" debido a la gran importancia cultural, política, religiosa y económica que ha tenido a lo largo de los siglos. Fue fundada en el siglo 800 a.C. sobre el río Tíber y pronto se convirtió en el centro del mundo antiguo. Todos los caminos llevan literalmente a Roma. Incluso hoy en día, esta metrópolis con gran cantidad de museos y edificios históricos cautiva a turistas de todo el mundo. Para que puedas explorar la ciudad y sus alrededores con la mayor libertad, el comparador de CHECK24 te ofrece una amplia selección de coches de alquiler de empresas internacionales y locales.

Roma está ubicada en el centro de Italia. Tiene próximo el mar Tirreno, colinda con la región de Los Abruzos y con las montañas Sabine y Alban, y el río Tíber recorre la ciudad. Desde Roma, podrás llegar a Nápoles en unas dos horas y a Florencia en unas tres horas con tu coche de alquiler.

Es muy fácil llegar a Roma. Por ejemplo, a través del aeropuerto de Roma-Fiumicino (FCO), que se encuentra a unos 31 km del centro de la ciudad. El aeropuerto no solo es el más grande de la ciudad, sino también de toda Italia. Muchas aerolíneas conocidas aterrizan aquí todos los días. Allí se encuentran numerosas empresas de alquiler de coches. En el aeropuerto, encontrarás varios carteles en la zona de llegadas que señalan el camino hacia el aparcamiento de las empresas de alquiler de coches. Otra forma de llegar al centro de la ciudad es en autobús, que sale de la zona de llegadas de la Terminal 2. También hay una estación de tren, cerca de las terminales de llegada y salida, desde la que salen trenes a intervalos regulares. Hay paradas de taxis en las salidas de las terminales 1 y 3.

Roma cuenta con un segundo aeropuerto, más pequeño y antiguo, el aeropuerto de Roma-Ciampino (CIA). Este está más cerca del centro de Roma, pero la oferta de vuelos es menor. No obstante, si llegas a este aeropuerto, también encontrarás algunas empresas donde alquilar un coche para tu viaje por la capital italiana.

La principal estación de trenes de Roma, Estación de Roma Termini, está situada en el distrito Esquilino, a unos 11 minutos del centro de la ciudad. La mayor parte de las empresas de alquiler de coches se encuentra en la plataforma 24 de la planta baja.

La autovía de circunvalación de Roma A90 recorre la ciudad conectando la capital con casi todo el país. Esta autovía es conocida por los lugareños como "Il Raccordo". La ruta europea E35 se desvía del "Il Raccordo" y se dirige hacia el norte a través de Florencia hasta llegar a Milán, y en dirección sur hasta Nápoles. Además, a través de otra carretera europea, la E80, puedes llegar a la costa este de Italia, donde podrás disfrutar de maravillosas playas de arena.

Si alquilas un coche de alquiler en Roma podrás hacer excursiones por los alrededores de una forma más fácil e independiente. Por ejemplo, en menos de una hora puedes llegar a la antigua ciudad portuaria de Ostia, situada en la desembocadura del Tíber. Allí se encuentra el paraje arqueológico de Ostia Antica, cuyas ruinas brindan una visión única de la vida cotidiana en la antigua Roma. Además, si viajas allí en los meses de verano, puedes refrescarte con un baño en el mar Tirreno.​

Tivoli está a menos de una hora en coche hacia el noreste. Los principales atractivos de este lugar son su pintoresco casco antiguo, la Villa Adriana, la Villa de Este y la Villa Gregoriana. En unos 45 minutos puedes llegar desde Roma a la ciudad de Palestrina. Se encuentra situada en la ladera del Monte Ginestro, un enclave perfecto para disfrutar de unas bonitas vistas y tomar fotografías. El santuario de Fortuna Primigenia es el principal atractivo de este paraje. 

También te recomendamos visitar el Parco Nazionale del Circeo, a unos 90 km hacia sur de Roma, con tu coche de alquiler. Este parque nacional combina bosque, dunas y una costa escarpada. La escapada perfecta para los amantes de la naturaleza.

Cada rincón de Roma esconde un retal de la extensa historia que caracteriza a esta ciudad. No en vano, el centro de la capital italiana ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Dentro de la propia metrópoli, se encuentra el pequeño país del Vaticano. La Basílica de San Pedro, una de las más grandes del mundo, destaca imponente en la plaza del mismo nombre. No obstante, la Capilla Sixtina, es la principal atracción de este enclave.

Al otro lado del Tíber está el Foro Romano. El centro de la antigua Roma todavía es testigo de la antigua gloria de la ciudad imperial. Aquí también se encuentra el edificio más famoso de la ciudad, o incluso de toda Italia: el Coliseo. Este enorme anfiteatro se utilizó, entre otras cosas, como escenario de luchas de gladiadores. 

Al norte del Foro Romano está la hermosa Fontana di Trevi. Recuerda lanzar una moneda a esta fuente con la mano derecha sobre tu hombro izquierdo para, según dice la leyenda, gozar de felicidad eterna y asegurar tu retorno a Roma. Tras una larga jornada paseando por sus calles, toma un respiro y disfruta de un café espresso en una de las pintorescas cafeterías del casco antiguo. Si quieres ver la ciudad desde un prisma diferente, acude al Castillo de Sant'Angelo. Allí te esperan unas maravillosas vistas de Roma.